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Síntomas y gravedad


Los signos de la infección por gripe H1N1 son similares a los de otras formas de gripe, e incluyen fiebre, tos, dolores de cabeza, dolor en los músculos o articulaciones, dolor de garganta, escalofríos, fatiga y rinorrea. También se dan algunos casos de diarrea, vómitos y problemas neurológicos. Un estudio publicado en el New England Journal of Medicine mostraba que el 94% de los pacientes tiene fiebre y el 92% tiene tos.

Las personas con mayor riesgo de complicaciones graves son las personas de 65 años y más, los niños menores de 5 años, mujeres embarazadas y personas de cualquier edad con trastornos médicos subyacentes, como asma, diabetes, obesidad, enfermedades del corazón, o un debilitamiento del sistema inmune (por ejemplo, quienes toman medicamentos inmunosupresores o personas infectadas con el VIH). Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), más del 70% de las hospitalizaciones en los Estados Unidos han sido personas con esos trastornos subyacentes.

Gravedad esperada


Los datos obtenidos hasta mayo de 2009 mostraban que los síntomas eran más leves de lo que las autoridades sanitarias inicialmente temían. A partir del 27 de mayo de 2009, la mayoría de los 342 casos confirmados en la ciudad de Nueva York habían sido leves, con solo 23 muertes confirmadas por el virus. Del mismo modo, Japón informó de 1048 casos, la mayoría de ellos leves, y no hubo muertes, por lo que el gobierno reabrió las escuelas el 23 de mayo, declarando que "el virus debe considerarse como una gripe estacional más".

Síntomas que pueden requerir atención médica


Algunos síntomas pueden requerir atención médica de urgencia. En los niños, los signos que deben ponernos en alerta son: dificultad respiratoria (como, por ejemplo, los labios y la piel azul), deshidratación, respiración rápida, sueño excesivo, temblores, e irritabilidad importante. En los adultos, signos que requieren atención médica son: falta de aliento, dolor en el pecho o el abdomen, mareo repentino o confusión. Tanto en niños como en adultos, los vómitos persistentes o volver a tener los síntomas de la gripe (como fiebre y tos), pueden requerir atención médica.

Trastornos subyacentes que empeoran los síntomas


La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó de que casi la mitad de los pacientes hospitalizados en los Estados Unidos tenían trastornos subyacentes. Según el informe de la OMS, entre los 30 pacientes hospitalizados en California, el 64 por ciento tenía trastornos subyacentes, y dos de cinco mujeres embarazadas desarrollaron complicaciones, incluyendo el aborto espontáneo y la rotura prematura de membranas. El 5 de junio, las autoridades sanitarias de seis estados informaron de las muertes por gripe H1N1 de seis pacientes que fueron diagnosticados con otros problemas de salud.

Sin embargo, los médicos de Nueva York sugirieron que las personas con "trastornos subyacentes" que tuvieran síntomas de gripe debían consultar a su médico primero. Las visitas a una sala de emergencias llena de personas enfermas puede poner más en peligro tanto a la persona afectada como a quienes ya están allí. El Dr. Steven J. Davidson, presidente del departamento de medicina de emergencia en el Centro Médico Maimonides de Brooklyn comentó: "Al igual que los asmáticos, las mujeres embarazadas deberían mantenerse alejadas de las salas de urgencias".